Hace más de un año, el Ayuntamiento depositó en un terreno municipal de la pedanía varias toneladas de uralita que hoy siguen sin recogerse
Hace algo más de un año, una terrible tormenta de granizo asoló la pedanía de Raspay. En aquel momento, tanto el Ayuntamiento como el propio municipio se volcaron para dar las mayores facilidades e implementar las ayudas necesarias para paliar los efectos de la catástrofe. Pues bien, esta semana, IU-Verdes ha tenido constancia de que existe acumulación de vertidos tóxicos en terrenos del Ayuntamiento que desde aquella granizada siguen a la espera de ser recogidos. En concreto, se trata de varias toneladas de fibrocemento, conocido popularmente como uralita, y que contiene amianto, un componente de alta toxicidad.
Creemos que ha pasado tiempo suficiente desde la tormenta como para que el Ayuntamiento hubiera retirado esos residuos que siguen arrumbados en terreno municipal como si fuera un vertido de escombros ilegal, ya que además del peligro que suponen, crean alarma social, algo que no debe fomentarse desde las instituciones públicas. Y más teniendo en cuenta que hay viviendas alrededor de este solar.
Además, debemos mencionar que ya se recogió parte del material –unas tres toneladas- en noviembre del pasado año, por lo que no entendemos como un año después de aquella primera recogida, el resto de escombros sigue allí.
Por todo esto, exigimos al Ayuntamiento que retire de inmediato toda la uralita acumulada y que adecente el solar para que no exista ningún riesgo sanitario para los vecinos de la pedanía de Raspay.