Luis Babiano, gerente de AEOPAS, impartió una charla donde explicó por qué los ayuntamientos deben volver a controlar el 100% del agua
elperiodicodeyecla.com – Luis Babiano, gerente la Asociación Española de Operadores Públicos de Abastecimiento y Saneamiento (AEOPAS) es uno de los mayores expertos en procesos de remunicipalización del agua. Izquierda Unida-Verdes lo trajo ayer a Yecla para explicar en qué consiste su propuesta de recuperar la gestión pública del agua en nuestro municipio.
El 28 de julio de 2010, a través de la Resolución 64/292, la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoció explícitamente el derecho humano al agua y al saneamiento. Desde ese momento, comenzó un proceso remunicipalizador que ha devuelto la gestión pública del agua a un sinfín de ayuntamientos de todo el mundo. “El agua remunicipalizada contribuye a la construcción del derecho de ciudad y vuelve a poner a los ciudadanos en el centro”, explicó, y remarcó que el agua no puede equipararse a otros servicios como la telefonía móvil. “En España es muy habitual comparar un bien común como el agua con el resto de servicios, pero, ¿es lo natural en el mundo?”, se preguntaba Babiano.
Y la respuesta es claramente negativa. Solo el 8-10% de las grandes ciudades del mundo tienen el agua privatizada. En todos los continentes hay hegemonía de lo público y en algunos países como Suiza u Holanda se prohibe constitucionalmente. Pero, sin duda, el caso más paradigmático es el de Francia, que desde hace 15 años no ha cesado en su empeño de remunicipalizar, especialmente tras el descontrol surgido con Veoz y Suez, las dos multinacionales francesas del agua. “El mejor ejemplo es París, que esperó a que caducara la concesión para recuperar la gestión pública”, añade Babiano. Y en el primer añoel recibo bajó un 8% y ahorraron 35 millones de euros. Además, formaron consejos de participación ciudadana para que opinaran sobre la gestión, la ciudad se llenó de fuentes y aumentaron los controles de calidad. “La remunicipalización es un fenómeno global”, aseguró.
¿Por qué se privatiza?
Esta fue la gran pregunta que rondaba la sala. Y la respuesta fue tajante: “Es un chollo para los gobernantes locales, pues se desentienden de la gestión real de un servicio y a cambio reciben una gran cantidad de dinero”. Y es que, según Babiano, “se privatiza para enjuagar las cuentas de muchos ayuntamientos”. Por ejemplo, el pasado año, Jerez decidió privatizarsu solvente empresa pública de agua. Aqualia le dio a cambio 80 millones de euros que sirvieron para maquillar sus maltrechos presupuestos. Pero al primer año, en una ciudad con 40% de desempleo, ya había más de 7.000 familias sin agua por impago. “Y el ayuntamiento no hizo nada, pues ese era un punto del contrato y quien paga, manda”. ¿Qué fue del servicio público? El agua se concibe como un negocio y no como un derecho humano.
Además, en España el mercado está copado por dos empresas: Grupo Agbar y Aqualia, que es quien tiene la concesión en Yecla. “Y claramente se ha comprobado que por culpa de este monopolio el servicio se ha encarecido, hay menos inversión, más sobrecoste y más corrupción, como el famoso caso Pokemon”, añade Babiano. Todo ello sin contar con que en nuestro país hay más de 500.000 familias que sufren cortes de agua por impago y 3,6 millones que tienen problemas para poder pagar la factura. Aun así, estas dos multinacionales –que han acabado con todas las empresas locales de gestión del agua- “facturaron 3.485 millones en 2013 y subieron la tarifa un 4%, algo incomprensible si tenemos en cuenta que los ciudadanos llevan cinco años seguidos reduciendo su consumo de agua”. Sin olvidar que el 26% de nuestro agua se pierde por el sistema de canalización, lo que convierte a España en el tercer país de Europa donde más agua se desperdicia, un dato alarmante teniendo en cuenta la escasez de agua que hay en el centro y sur del país.
Por eso, en España ha comenzado ese proceso de remunicipalización, “especialmente necesario en zonas como Murcia, donde más del 80% del agua tiene gestión privada”, explica. Ciudades como Torrelavega, Manacor, Ermua o Medina Sidonia –cuya remunicipalización, dirigida por Babiano, ha sido puesta como ejemplo por la ONU- ya vuelven a tener gestión pública del agua. “Pero también hay ayuntamientos del Partido Popular como Arteixo en Galicia o Priego de Córdoba”, matiza. “Y no son empresas mixtas, sino públicas 100%, porque las mixtas acaban siendo igual de nefastas que las privadas, puesto que el gestor lo pone la empresa y siempre acaba pidiendo más derramas a los ayuntamientos para sufragar los supuestos gastos inesperados”, añade Babiano.
El proceso de remunicipalización
Luis Babiano reconoció que no es fácil decirle a la empresa que no se renueva el contrato. “Para poder retomar la gestión pública hay que estudiar muy bien el pliego de condiciones para ver qué incumple la empresa, porque siempre que se intenta romper el contrato llega con una factura a modo de finiquito”, asegura. Y Babiano conoce muy bien a Aqualia. “Siempre ofrecen cambiar esa supuesta deuda con una prórroga del contrato y algunos ayuntamientos ceden para no enfrentarse a su gran ejército de abogados”, comenta. Por eso es importante llegar a un mutuo acuerdo para rescindir la concesión.
También es vital elegir cuál será el nuevo modelo y conseguir un acuerdo unánime en el pleno, “pues este tema no se puede politizar”. Además, es fundamental mantener a la plantilla con la que cuenta la empresa. “Es importante hacer un estudio y ver si hay más trabajadores de los que realmente se necesitan, pero siempre es interesante contar con al menos el 90% de la plantilla que tenía la empresa concesionaria”, advierte Babiano.
Para el gerente de AEOPAS el proceso de remunicipalización es vital y algo que deben asumir todos los ayuntamientos. “Dirigir correctamente una ciudad no es poner más rotondas o menos, sino que pasa por gestionar servicios tan importantes para sus ciudadanos como el agua o la recogida de basuras”, añade. Por eso, “no podemos permitir que estas dos empresas multinacionales ganen millones de euros con este derecho humano y blinden su negocio en detrimento de proteger al ciudadano”.
En el acto se presentó también el número 7 de «La Zocata», revista de IU-Verdes que dedica todo este número a explicar detalladamente la remunicipalización del agua y de otros servicios como las basuras. Se puede leer y descargar en este enlace.